“Tenía sesenta y pocos años, pero la muerte le había borrado las arrugas”
Harlan Coben parece decirnos, en ‘El inocente’, que la muerte es mejor que cualquier operación de cirujía estética. He aquí la fuente de la eterna juventud.
Harlan Coben parece decirnos, en ‘El inocente’, que la muerte es mejor que cualquier operación de cirujía estética. He aquí la fuente de la eterna juventud.